jueves, 18 de enero de 2007

LAS QUINTAS DE SAN FRANCISCO DE LIMACHE

LAS QUINTAS DE ANTAÑO DE SAN FRANCISCO DE LIMACHE.

Tenemos un vago recuerdo de don Belarmino Torres , al parecer usaba lentes, algo encorvado y mayor de 50 años, con su inseparable portadocumentos, hombre inquieto, mucho màs alto que yo , en aquellos años, mas bajo dirìa el dìa de hoy. Y que le parece don Carlitos la ùltima del municipio, el Chono se deja querer por la Palmirita y el ” sapito Vilches “, don Chono como regidor independiente tiene la llave para dicidir quien se sienta en el sillòn de don Crisóstomo la pròxima semana , que es cuando se elige el nuevo Alcalde , don chono como buen huaso “ pà las atajà “ de 6 puntos buenos, le dijo al ponchito Rioja que con la mitad del periodo se conformaba , ante el espanto de algunos presentes . Esto se comentaba mientras don Carlos Amaranti, corresponsal del diario la Unión de Valparaíso , tecleaba y tecleaba su vieja maquina de escribir, era dìa sàbado y la correspondencia màs copiosa, por cuanto al otro dìa, es decir el Domingo, los periòdicos traìan mas cuerpo e incluso suplementos.





Mientras se tecleaba ràpidamente lo que yo le dictaba a don Carlos desde un borrador que èl habìa preparado durante la semana. Gente adulta entraba y salìa de la corresponsalía de la Uniòn, que estaba ubicada a la entrada, lado derecho del recientemente construido edificio del Banco del Estado, Urmeneta casi esquina de Prat. La historia y el diario acontecer de Limache pasaban por los dedos de don Carlos, don ¡¡ Carlos ya son las 13,15 !! le digo, es de todos los sàbados y la carrera me toca a mi. Lo propio ocurrìa en la corresponsalía del Mercurio a cargo de don Hugo Luzzi, frente a la farmacia Chile .

El dìa sàbado era como el resumen de la semana , mucho ajetreo, copuchas de ultima hora, personajes o quienes aspiraban a ello , se daban una vueltecita por las corresponsalías y procuraban enterarse si formaban parte de algùn pàrrafo o en el peor de los casos si le darìan un “palo” por su accionar durante la semana en los asuntos cìvicos de la comuna.
Don Belarmino Torres era Historiador y parte de su tiempo lo pasaba en Santiago adonde al parecer era Profesor, escribìò muy a su manera , en forma de cortos pàrrafos la historia de Quillota, Quilpuè, y Limache, de esta ùltima me obsequio un ejemplar y comencè a enterarme que lo prestado es sinònimo de lo regalado , afortunadamente en la comuna habìan bastantes copias. y son las 13,30, ràpidamente todo lo escrito y algùn chequecito de los avisos econòmicos, ordenadamente adentro de un gran sobre y la acostumbrada carrera a la estación del ferrocarril, son veinte para las dos de la tarde, como todos los sàbados, puntual , entra el tren Arratia a la estación de Limache , algunos miran su reloj, para corroborar si este marcha bien. A continuación de la locomotora viene el carro de las encomiendas y el correo, el encargado del vagòn es certero en lanzar la bolsa de la correspondencia de Limache y Olmuè, en plena marcha , a un poste con un gancho para el efecto , metros màs allá se detiene el tren, varios hacemos fila e incluso el amistoso “ rival “ del Mercurio, y me empino levantando la tapa del buzòn , sobre adentro y serà hasta la pròxima semana.

Como limachino y querendòn de estas tierras, le agradecemos a don Belarmino Torres sus apuntes y juntos compartiremos a travès de sus escritos e interpretados a nuestra manera, el Limache de comiènzos del siglo pasado .
El barrio de Limache correspondiente a la comuna del mismo nombre, se dedicaba preferentemente a la agricultura y servicios, el barrio San Francisco de Limache , era eminentemente residencial y lugar de descanso los fines de semana y veraneo en la estación estival.

Las Quintas : San Francisco de antaño era, segùn algunos , un verdadero paraíso. A su clima previligiado y bellezas naturales se unìa la opulencia y refinado buen gusto de los pricipales del pueblo, que vivian en hermosas casaquintas Los caballeros elegantes y sobrios y las damas a la moda, pero si, muy recatadas, algunas casaquintas que le dieron señorìo a San Francisco las veremos a continuación, claro que muchas de ellas pagaron caro tributo al terremoto de 1906, luego aùn más alto a la crisis del Nitrate o salitre, sin embargo reparadas o nuevas, hoy se cuenta con mansiones, casaquintas e edificios dignos de elogio, que hacen un barrio diferente en esta parte de la Quinta Regiòn, como lo atestiguan algunas fotos que acompañan a estos comentarios, sin dejar de considerar a las escuelas Rafael Lòpez y Estandar de niñas o Brasilia como se conoce hoy, de las que ya nos ocuparemos.

Casaquinta de don Josè Tomas Urmeneta, al interior de la calle Maestranza ( Prat ), arriba de calle Palmira Romano Norte, lugar de las “ casas “ de la hacienda y a un costado la planta elaboradora de vinos Urmeneta , mostos que recorrieron toda la costa del Pacifico hasta California a 20 centavos el litro a granel y un peso el litro embotellado, puesto en el lugar de embarque, Valparaíso ,. Cada una de estas casaquintas fueron enriquecidas con un parque de flora y àrboles exòticos, ademàs de esas hierbas gigantescas que son esas delgadìsimas palmeras que dominan el paisaje urbano de San Francisco. Otro rasgo de estos parques familiares fueron las glorietas para “ hacer “ onces a la manera Inglesa, es decir a las cuatro de la tarde, a diferencia de los jesuitas que lo hacìan a las 15,30. No debemos olvidar también el huerto familiar e infaltable y generoso parròn, todo regado a travès de pequeñas acequias, las que eran y son alimentadas por aguas del canal Whaddington mediante una red de canales que recorren toda la ciudad .
De los señores Clark Sarmiento ( familiares de los hermanos Clark, ingenieros constructores del ferrocarril Lo Andes a Mendoza ). Pelegrino Carriola , Federico Squaire , Santiago Severin , Francisco Montanè casa de veraneo del embajador de Alemania, Japòn, familia Dèlano Ross, Dèlano Burton y Mac-Clure en Palmira Romano Norte .
De don Ramòn de la Cerda, fundador de San Francisco , en calle Palmira Romano Oriente esquina Urmeneta.
Del señor Pinto Isarra, actual quinta el Palacio, de don Alberto Anwandter en calle San Martín con O`higgins, en los jardines habìan numerosas estatuas y se permitìa al publico visitar el parque los dìas Domingos .
De los señores Matìas y su hijo Luis Cousiño, casaquinta donde funciono el Seminario San Josè , por un tiempo también cobijo a la escuela llamada hoy Rafael Lòpez y màs tarde fue del vicealmirante Simson. Esta quinta fue mucho mucho màs grande que lo observado hoy , en este terreno se construyo la ùnica piscina temperada que se conozca y fue toda una atracción familiar , relaciones y visitas . Los Cousiño pioneros del carbòn de Lota y Curanilahue se establecieron en San Francisco por su cercanìa con el puerto de Valparaíso, puerto que conectaba con los puntos adonde realizaban sus actividades. Aunque los orfebres jesuitas bàbaros utilizaron el combustible carbòn piedra en sus fraguas , dado ha conocer por los Mapuches del sector la existencia de estas piedras que “ ardìan , sin embargo fueron los Cousiño a quienes se les ocurruiò su uso industrial , alentados por don Josè Urmeneta , el que fue uno de sus mejores clientes.Cuando hay riquezas y actividades exitosas que involucren a mucha gente nacen los “ decires “ y leyendas y los Cousiño no estuvieron ajenos a esta situación, una de las leyendas de la mansión de esta familia de San Francisco , “ segùn cuentan “ porque nunca se narra en primera persona , nadie asume responsabilidad alguna de lo comentado, el asunto es que los Cousiño en años muy lluviosos , sacaban al patio y armaban unos mesones de vez en cuando, para depositar sobre ellos un montòn de monedas de oro y de esta manera el sol ahuyentara la humedad . Otros decires del folclor popular sobre esta mansión en Leyendas de Limache.
De don Guillermo Rivera Cotapos en la actual calle Caupolicàn con Dolores, en donde tenia un criadero de orquìdeas, crisantemos y champiñones. Además diversos animales , entre otros, monos y llamas, lo que constituian un verdadero zoològico, don Guillermo Rivera fue Senador y Ministro de Hacienda. En Valparaíso era dueño del diario “ El Dìa “ , fue padre del Senador Gustavo Rivera Baeza y abuelo del diputado Guillermo Rivera Bustos.
De don Edmundo Eastman Cox, en la actual quinta donde hoy estàn los Hermanos Maristas , Caupolicàn esquina Palmira Romano Oriente.
De don Aniceto Vargara Albano, estaba en la cuadra del hospital Santo Tomas , enseguida fue de la familia Edwars Atherton, don Aniceto fue Ministro Plenipotenciario de Chile en Francia.
De don Arturo Searle Lorca, en avenida Urmeneta con calle Colòn, fue contraalmirante de la Armada, después esta quinta perteneciò a don Rafael Torres Ibieta, el que fue embajador de Chile en Colombia.
Como estas, habìa otras quintas con fastuosas residencias que daban a San Francisco el aspecto de una inmensa mansión señorial y romàntica , ideal para vivir y soñar o pasar algún tiempo recreàndose con tantas maravillas. Y por ultimo no olvidemos la casa de veraneo del Cónsul ingles en Urmeneta esquina Dolores , donde esta hoy toda una población.

En esto de las mansiones de San Francisco debemos de considerar un antes y un después del terremoto del año 1906, terremoto que fue desvastador en toda le zona , luego agreguemos el terremoto financiero del año 1929, y la aparición del salitre sintètico y la construcciòn del Canal de Panamà, decayendo notoriamete la actividad en Valparaíso, tanto en el transporte como en lo financiero, todo esto afectò a San Francisco, sin embargo aun podemos contemplar magnificas residencias que le dan un tono distinto y evocador a Limache, tal como podemos apreciar en algunas fotos que acompañan estos comentarios.

Folclor de los Chilles. Radio Municipal Participa.
Andrès Moyano Vàsquez.
Comuna de Limache.

martes, 16 de enero de 2007

Limache y los curas Doctrineros.











RECORDANDO A LOS CURAS DOCTRINEROS A PROPOSITO DE LAS FESTIVIDADES DE LAS 40 HORAS.

HISTORIA DE LOS PRIMEROS TIEMPOS DE LO QUE SERA LA CIUDAD DE LIMACHE.

En las festividades de las 40 Horas de Limache, los peregrinos dan fe a toda prueba de sus creencias, mediante mandas y sobre todo, paciencia, un caminar y caminar de leguas, como si recordaran a los curas Doctrineros, los que a su paso extendieron el nombre de un rincòn del valle , con su acciòn, a toda una comarca lo de “ Limache “ .
La “ abuela “ de la iglesia conocida como de las 40 Horas, fue levantada en la rivera norte del estero hoy llamado Limache , fue una capilla de tejas y adobes con un dosel y un frontal, por el año 1636.



La venida del Cura Doctrinero desde el valle de Quillota, es un tanto sacrificada, por cuanto los españoles viven en el lado norte de rìo Aconcagua , sector de Rauten, por razones que en otro tema de vuestro programa folclor de los Chilles lo conversamos.
A pie, o en el mejor de los casos en mula, el curita atiende un vasto sector, hace menciòn de ello el obispo Santiago Villarroel al gobernador de Chile, Francisco Lòpez de Zùñiga, en una carta fechada en 1641.
El aludido en el valle de Limache tiene que hacer misas, confesar, olear, bautizar, casar, aconsejar y dar los cristianos responsos a negros, mulatos, mestizos, españoles y alguno que otro Picunche heredero de misia Mariana de Osorio.
Su jurisdicción abarca desde las playas de Concon, al portal de Til Til, y desde Marga-Marga y los pies del Colliguay a Rauten, ya que todo es una sola Doctrina, con un gran rìo de por medio y el pobre cura arriesga en ahogarse, por 60 pesos al año .Hasta que el cielo se apiada del cura Doctrinero y con fecha 14 de julio de ¡¡ 1662 !!, el fraile que nos atendìa se entera que otros curas se sumaran a la tarea evangelizadora y que se organizaran otras doctrinas y se evitara el gran rìo. Ocurre que el Obispo de Chile , Diego de Humanzoro , envìa a rey de España un informe que señala los deslindes de las doctrinas de Aconcagua bajo ; Doctrina que abarca la banda norte del del río hasta la Ligua y que se llama Catapilco, y el lado sur de dicho río se llama Doctrina Quillota hasta Llay-Llay y Doctrina Limache desde Putupur,
( San Pedro ), hasta Quilpuè y Colliguay, y desde las playas de Con Con hasta la Doctrina de Colina. Ahora son tres curas y a ninguno le acechara el gran río.

En las festividades religiosas de las 40 Horas limachinas, de alguna manera los caminantes peregrinos estàn rindiendo tributo a la memoria de aquellos curas que traìan la Palabra, hace mas de 400 años, sus polvorientas y cansadas sandalias, habrìan los senderos doctrinales en este valle como un sino continuado de los otros senderos ya recorridos por las Machis , lo que le da un carácter espiritual a lo fundacional del nombre Lli-Machi,
( Limache)
Andrès Moyano Vásquez. Comuna de Limache.
Abril de 2005.

jueves, 11 de enero de 2007

Como nació el nombre de Lli--Machi.

Vocabulario. Antü, sol en mapuche. Inti, sol en Quechua.
Picun, norte en Mapuche. Incahuasi, casa del Inca, administración.
Putupur, hoy San Pedro. Ayllú, aldea Quechua o Atacameña.
Quipucomayu, contador del incahuasi. Chasqui, correo del Inca.
Quipu, manojo de cordeles de colores y nudos en clave.
Cajamarca, lugar donde fue muerto el último Inca, Atahualpa.
Ulpo, harina de quínoa con agua caliente . Huaynas, jóvenes .
Machi, cultura Mapuche, él o la meica sanadora del cuerpo y del alma.
Pachacama,Quechua, madre tierra. Amauta, hombre sabio.
Lli- cultura Mapuche, lugar, procedencia, antro o cueva, piedra grande
Lli -machi—procedencia del o la machi. Voz de Arauco. Padre Ernesto
Willhelm de Moesbach. Estudio lengua Nativa, en Limache, I952
Ngenechen, máxima creencia espiritual Mapuche. Cong –hué voz
Mapuche, lugar de cosecha.

Hacìan muchos, pero muchos antü, que gente venida del Picun se había instalado en el valle de Quillota, levantando un templo en el cerro Mayaca, a orillas del gran río para adorar a un sol que llamaban Inti, buscaban todo lo que brillara, al parecer de eso vive su dios. Los extraños nombran mucho un lugar llamado Incahuasi, lugar de adonde se manda. Más de algún Picunche cazando al otro lado de Cai-Cai, en Putupur, agazapado entre las altas hierbas, ha visto a los extraños y escuchado su rara lengua, miran en forma altiva al horizonte, como si todo les perteneciera y son muchos. Los Picunches, gente de esta tierra, se replegó a las partes altas de Uëllngu-hué---Olmué---, y los del otro lado del estero de Pelumpén, hacía Lliuco—Lliuylluy y Colliguay
Era Quillota el más grande e importante de los Ayllú de esta parte de Chille o Chili. Era residencia permanente del Curaca y del Quipucomayu imperial. En el incahuasi ya se sabía que hombres de ropa brillante y extrañas armas, habían llegado al Cuzco y todo el mundo incásico estaba expectante por nuevas noticias. Sinqui Yapanqui se dirigió raudo a casa del amauta Mayta Roca, no había razón para hacer esperar al chasqui, ya que debía traspasar el manojo de mensajes a otro que continuara al final del viaje, valle del Mapuchu, adonde el curaca Vitacura. En presencia del leedor de los quipus, fue entregado lo recién llegado del Antisuyo, era urgente, como nunca fue necesaria tanta rapidez, y el quipu paso de mano en mano, de tambo en tambo, de chasqui a chasqui de sol a sol , de luna a luna, y todos los enterados quedaban pálidos, el hijo del Sol, Atahualpa, estaba capturado por los extraños, ¡ ¡ no es posible !!.
¡ ¡ y se pide como rescate por su vida, tanto oro como nunca se ha visto !! Luego Mayta Roca dice a Sinqui Yapanqui, las ordenes son claras, los tesoros del Peñon del Brujo---la Campana--, deben ser nuestros y luego


despachados a Cajamarca, cargados sobre las llamas. Sinqui, arrugó el
entrecejo, ¿ porque él debía tomar la iniciativa en cuanto al tesoro ? , no
habría otro más preparado en el idioma Picunche y llegar a un acuerdo y evitar un enfrentamiento, o quizás, no se olvidaban que siendo fiel soldado del Inca, el mismo pidió que lo mandaran a estas lejanas tierras, para servirlo mejor, y el tiempo apremiaba, se trataba del hijo del sol, del cual todo dependía, incluso sus propias vidas .
En casa, Sinqui Yapangui, se sentó, mientras su mujer le servía un humeante tazón de ulpo de quínoa, con un poco de miel de quilo y pensaba, hasta el momento no se ha podido establecer ningún Ayllú en las tierras de los Picunches, son pocas las familias pero muy inteligentes y cuentan con el respaldo de sus brujos. Se deberá tomar el Peñon y establecerse allá, un Ayllú. Y comienzan los preparativos, en el gran patio del Incahuasi , 200 huaynas convocados por Mayta Roca dirigidos por Sinqui, se ejercitan con lanzas, flechas, rápidas carreras y paveses. Hicieron largas caminatas, todos eran fuertes, ¿ que podría el brujo intentar con ellos ?. El plan era sencillo, se vendrían por Ocoa y subirían el cerro, desde ahí localizarían la casa del brujo, lo apresarían y lo enviaran al Cuzco para que el Inca disponga de su vida o de sus artes.
Y llego el momento, ¡ ¡ bien Sinqui Yapanqui, tenemos fe en ti !! pero, aunque eres un hábil guerrero, ten cuidado, quién sabe si es cierto el poder de los brujos y Machis del pueblo Picunche, ¡ ve !, te espera una gran tarea, que la Pacha Mama te guarde siempre. Después de dormir sosegadamente emprendieron la marcha por Ocoa.

¡ ¡ Pueblo Picunche , días aciagos se aproximan !! ¡ ¡ es necesario que las familias de ambos lados del río se junten, para hacer frente al quechua, que arteramente se nos viene por la espalda, en las sombras de la noche, para apoderarse de nuestros tesoros. El Machi Caleu desde la entrada de su Lli-
lugar del cerro desde adonde provenía, hablo a los Picunches, había que prepararse y repeler el ataque. Aunque en su intimidad, en el albergue de su Lli, el Machi Caleu sabía que los Quechuas eran muchos y que él, personalmente tendría que actuar.
Se tomaron las medidas del caso y mientras los Picunches se movilizaban Caleu convoco a las machis del sector y les explico el único camino posible.
A la más sabia y anciana le dijo que tendrá que convertirse en piedra y quedarse vigilante frente al Peñón del Brujo, hasta que un día él la despierte.
Caleu, deberá cambiar su supremo esfuerzo, por su cuerpo en sueños, a los píes del cerro el Roble, junto a sus mayores, Caleu es un brujo poderoso y de buenas artes, pero el que se encuentra arriba, Ngenechen, tiene sus condiciones y no se le discute. Y los Quechuas aparecen por el portal del cerro Imán, son semirechazados y así transcurre la tarde y llega la noche,
noche terrible en los montes, talcas y relámpagos, Pillàn en todo su furor y
esplendor. Un viento estremecedor, del abismo profundo surge ronco el crujir de rocas, es el parto de los montes. El juego de sombras, delata que la cima en
forma de campana se resquebraja, se parte y pierde su forma original. Hasta los pumas huyen, después de terribles horas y de total oscuridad, los estertores finales y una paulatina e inquietante calma, hasta que abre el día, se ve radiante, diáfano aire, serena mañana, aunque silencio de pájaros, ¡ ¡ algo falta !!, ¡¡ el sol no tiene respuesta a su brillo desde la cima!! . De algún cerro o quebrada, de algún riachuelo o portal, de algún roble o retorcida patagua, del resplandor o de las profundidades de las garganta de los rocosos acantilados, surgió la exclamación, ¡ el Peñon no brilla ! , efectivamente, el cono de la Campana se había partido en dos o tres pedazos y solo se encontraba cubierto de piedras, rocas, tierra y espinas, de los tesoros, nada.
Durante la infernal noche, los atacantes confundieron los caminos, se precipitaron a los abismos, sus soberbios arcos y flechas amanecieron cual blandas ramillas y las lanzas y paveces se los llevo el viento. Sus ojos, multiplicaban a los defensores y al ya no haber tesoro, volvieron avergonzados, tras sus pasos.
De las pepita de oro dispersas por esos cerros, después de aquella terrible jornada, los pirquineros con bastante esfuerzos suelen encontrarlas. Del tesoro mayor, este descansa en las profundidades, allá en el fondo del valle.
Se cuenta, que cuando toda la zona, su gente, este en armonía con el entorno y consigo mismo, el tintinear de campanitas despertara a la Machi convertida en piedra y junto al Brujo Caleu, dispensara a todos los hijos de esta tierra, los dones de aquellas montañas.
Y desde aquel día a un lugar de estas comarcas se le comenzó a llamar Lli-Machi. Punto en que el brujo Caleu llamó a los Picunches de ambos lados del estero Conhué--despues llamado Limache—a unirse frente a los problemas que se les pudiesen presentar
Andrés Moyano Vásquez.Comuna de Limache.
Mayo de 2004.